P. Felipe de Jesús Carranza Orozco SDB
Nací en Guadalajara el 9 de agosto de 1962. En 1976 entré al Aspirantado Salesiano. Estudie Normal Básica en el Instituo de Orientación Vocacional (IOV), la Lic. en Lengua y Literatura en la Normal Superior Nueva Galicia. La Filosofía en el Estudiantado Filosófico Salesiano de Coacalco, Edo. de México y la Teología en el Instituto Teológico Salesiano de Tlaquepaque.
Recibí la Ordenación Sacerdotal el 19 de diciembre de 1992 en Tlaquepaque. Realicé una Especialidad en Educación Cognoscitiva en la Universidad Jesuita ITESO, en Guadalajara. Soy Docente en Salesianidad por el Centro Regional de Formación Permanente en Quito, Ecuador; y participado en cursos y seminarios de Pedagogía Salesiana en Turín, Roma y Madrid.
He sido director en los Colegios Salesianos de Chihuahua, Guadalajara y actualmente en Saltillo, Coahuila.
La devoción mariana en Don Bosco
El tema de este Mini Curso, tiene como finalidad hacer un recorrido con Don Bosco en su tierra, con su gente y en su tiempo. Ver cuál fue su vivencia y experiencia en relación a su devoción con la Santísima Virgen María, en las diferentes advocaciones propias de los pueblos del Monferrato (Castelnuovo, Capriglio, Murialdo, Mondonio, I Becchi), la iconografía mariana, las prácticas devocionales y religiosas como el rezo del santo Rosario, el Angelus, y sobre todo las oraciones del buen cristiano que Juan Bosco aprendió de labios de su madre.
Es fundamental la presencia y el acompañamiento que Mamá Margarita dio a sus hijos, de manera particular a Juan, pues él sintió y experimentó la presencia de la Virgen María a lo largo de toda su vida como “Madre”, gracias a la presencia constante de su madre, desde I Becchi hasta Turín, donde murió.
Es interesante constatar cómo fue madurando su devoción y muestras de cariño a la Virgen María, en su niñez y adolescencia, en su juventud en los años de seminario, después como sacerdote, en su práctica pastoral en Turín, donde logró hacer una preciosa síntesis de su vivencia y devoción a María como la “Inmaculada Auxiliadora”.
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