El 9 de junio de 1868, se consagró en Turín la Basílica de María Auxiliadora, así expresaba Don Bosco su gran confianza en la Madre de Dios. Cuando opta por venerar a María con este título, así lo manifestó a Juan Cagliero:
«La Virgen quiere que la honremos con el título de ‘Auxilium Christianorum’: los tiempos que corren son tan tristes que necesitamos premiosamente que la Virgen Santísima nos ayude a conservar y defender la fe cristiana» (MB VII, 334).
Este título de "la Virgen de los tiempos difíciles" puesto a este Congreso, quiere celebrar por un lado el 150° aniversario de la Consagración de la iglesia madre de la Familia Salesiana y al mismo tiempo, elevar una súplica a la Madre de Jesús por todas las situaciones difíciles que en los últimos años viene viviendo la Iglesia universal y en México: persecución, violencia, corrupción, asesinatos... Ella, la Madre de mirada compasiva en Guadalupe, nos impulse a un renovado seguimiento de Jesucristo y a un compromiso en "auxiliar" todos los hijos e hijas de Dios.
Los siguientes vídeos fueron presentados en la apertura del Congreso para ilustrar estos grandes motivos:
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